Plantas alimenticias (Huertos del viejo mundo)

El cultivo de productos de la huerta debe tener en cuenta, la biología de las plantas. Así, existen cultivos de verano, las verduras por ejemplo, y cultivos de invierno como el del trigo. En función de ese ritmo estacional se trabajan y preparan los campos.

En este espacio se encuentran los cultivos alimenticios del Viejo Mundo, tal y como se han regido durante miles de años, en función del periodo del año en que lo visite. La distribución de estos cultivos sigue el modo de las acequias árabes. El agua emana de la acequia y se distribuye por canales a los huertos.

Todos los cereales del Viejo Mundo proceden de Oriente próximo o Asia, y de allí se extendieron por todo el planeta. El Triticum monococcum , de nombre común el trigo, es el cereal mediterráneo por excelencia. Su cultivo ha sido complicado en climas atlánticos, especialmente en zonas costeras. Sin embargo, la variedad de cereales permite encontrar el cultivo adecuado para cualquier región.

Fueron los egipcios los primeros en darle importancia a las leguminosas pues, hasta ese momento eran consideradas malas hierbas de sus cultivos de cereal. La lenteja o Lens culinaris fue la más apreciada, especialmente por la cultura greco-romana, que le atribuía propiedades no sólo alimenticias sino también medicinales. Hoy en día forman parte fundamental de la dieta aportando minerales y, además, nitrifica los campos donde se cultivan.