Tan sólo los "soutos" de castaños, y alguna carbayeda como ésta, representan ejemplos de bosques adehesados, tan frecuentes en el mediterráneo peninsular. Gracias al sistema mixto de explotación, la "Carbayeda del Tragamón" conserva aún carbayos centenarios, que se acompañan de algún que otro castaño "de fruto", aprovechados para la producción de castañas.